No entiendo nada.
Quizá son recuerdos del pasado... Pero tengo "miedo".
A diferencia de lo que muchos pueden pensar o no pensar, no es por los exámenes, y esto me asusta aún más. Debería tener miedo por los exámenes, debería "cagarme por la pata" al pensar que apenas he empezado y estoy perdiendo el tiempo con esto. Mucho temario, pocos días y exámenes seguidos. Sí. Pero es un reto y no me da miedo.
Se acerca el día 11 de junio. Fecha fatal, el día que nací, el día que cumplo años, un día al que le he cogido manía, un día que me asusta.
Pero, ¿por qué? De pequeña me encantaban, me hacían regalos, lo celebraba con la familia, con los amigos, me encantaba. Todo el año, junto con el 6 de enero, esperaba impaciente el día 11.
¿Ahora? Sinceramente no me hace gracia cumplir años, ser un año más vieja. Aunque no sé ni por qué pienso esto, pues no cumples un año en un día. El recorrido lo marcan 365 días y es por eso por lo que odio que se le de tanto protagonismo a algo que apenas tiene importancia.
Es por esto el hecho de que me irrite tanto que toda tu familia te llame ese día, te pregunten cosas novedosas sobre tí, qué te han regalado, y cuántos años cumples. Siempre la misma rutina, las mismas preguntas. Me aburre. Nadie me llama los restantes días... ¿por qué ese día sí? Vale, es cierto, que es un pretexto para que te llamen porque se acuerdan de ti y te quieren... ¡Como el día de todos los Santos! Día conmemorable de los muertos y difuntos, un día para recordar y visitar. Exactamente igual, solo que aquí tú estás viva.
Lo confuso y extraño de todo esto, es que (al igual que con las bodas) me encantan los cumpleaños de los demás. Me encanta liársela, hacer que sea un día especial para ellos. Dedico mucho tiempo a prepararlos, a estudiar los comportamientos y los gustos, y me agrada hacerlo.
Es una paradoja, lo que no me gusta que me hagan a mí, lo hago yo a los demás. ¿O tal vez no lo es?
No quiero que se sientan solos, no quiero que lo pasen mal, simplemente quiero que sea su día, un día donde todos pensemos por el bien de, que prioricemos sus gustos y quitemos los nuestros. Solo por un día uno es el rey con los súbditos que quiere tener. Así quiero que se sientan.
Pero yo no quiero sentirme así. Me da miedo. Mis amigos quieren hacerme algo. Y no les culpo porque yo empecé la guerra. Quiero dar tregua por unos días sólo debo estudiar y pasar el tiempo así.
Si les he dicho que no quiero nada, no quiero celebrarlo, no quiero nada de nada. Pero no lo entienden, o mejor dicho, no quieren entenderlo.